¿Cuántas veces nos encontramos esperando a cumplir un gran sueño o a que pase algo grandioso que nos permita llegar a ser felices? ¿Y si las pequeñas cosas del día a día fueran grandes momentos de felicidad? Nuestro gigante Arturo López nos habla de cómo algunos de los momentos más felices de su vida eran acciones diarias con su familia, lo que nos hace poner en perspectiva qué debiera ser la felicidad para cada uno de nosotros. También nos cuenta cómo fue acompañar a su madre en sus últimos años de vida, como su sostén y apoyo, en momentos muy duros debido al Alzheimer y nos menciona todos los aprendizajes de vida que supuso para él transitar esta situación. La felicidad está en nosotros, todos los días, en lo que ya hacemos y vivimos, sólo es necesario que seamos capaces de percibirlo para comenzar a ser felices, sin perdernos en esa búsqueda interminable de lo que pensamos que es "la felicidad".