A veces, caer es lo único que te lleva a descubrir el verdadero sentido del amor. Haley está a punto de afrontar su primer año de universidad. La primera vez lejos de casa, de su familia, de todo lo que conoce. En realidad, no de todo: allí está el hijo de unos amigos de sus padres, que estudia en el campus y que es, precisamente, el elegido por su padre para estar “un poco pendiente de ella”. Ningún problema por eso, excepto porque a los quince estuvo un verano entero colgada por él y porque ahora, tres años más tarde, se ha vuelto insufrible. Por suerte, o por todo lo contrario, no es el único que estudia allí y pronto Haley cruzará su camino con el de un misterioso chico de ojos grises cuya mera presencia grita problemas. En ese primer año de universidad, lo más difícil para Haley será determinar a qué o a quién corresponde exactamente la palabra «amor».