Tras una experiencia que cambió su vida en 1969, cuando Sheila Gillette estuvo a punto de sufrir una embolia pulmonar durante el parto de su tercer hijo, se embarcó en un viaje extraordinario. Tras recuperarse milagrosamente, se vio inmersa en diversos fenómenos psíquicos y acabó convirtiéndose en el canal de voz directo de un grupo de doce arcángeles conocidos colectivamente como THEO. Validados por investigadores parapsicológicos y aceptados por cientos de miles de personas que buscaban las percepciones de THEO, los dones psíquicos de Sheila fueron ampliamente reconocidos. Notablemente, entre aquellos que fueron tocados por la influencia de THEO estaba Esther Hicks, cuyo encuentro con Sheila y THEO sirvió como catalizador para su propio viaje hacia la canalización de ABRAHAM.

Esther, famosa por sus libros y enseñanzas superventas, atribuye a THEO la predicción de su transición a la canalización y la orientación para abrazar el proceso espiritual. Aunque THEO está formado por doce seres angélicos, sus mensajes se transmiten a través de Sheila con una voz singular. THEO, que opera desde dimensiones superiores sin encarnación, hace hincapié en la integración del alma como camino fundamental hacia la auténtica plenitud, a menudo equiparada con la iluminación. Los retos y aspiraciones de los individuos, tanto a nivel personal como colectivo, encuentran resolución a través de la búsqueda de la integración completa del alma. En consecuencia, la Ley de la Atracción adquiere un significado más profundo, transformando las visiones deseadas en una integración holística de mente, cuerpo y espíritu.

Disfruta de mi conversación con Sheila Gillette.